¡Esta receta de mermelada de mora es muy fácil de hacer!
Es perfecta para decorar y rellenar tartas, para consumir durante el desayuno con una tostada o para cualquier receta dulce que se nos ocurra. Además, se trata de una forma magnífica de aprovechar la fruta madura, ya que en este estado queda todavía más dulce.
Si no sabes cómo hacer mermelada de mora casera y te gustaría aprender, en esta entrada te comparto una receta muy sencilla que no te va a llevar más de tres pasos. ¡Sigue leyendo!
Al igual que ocurre con la mermelada de mandarina, la mermelada de mora requiere su tiempo de cocción, hay que tener paciencia porque el resultado vale la pena. Además de sabrosa, esta mermelada es mucho más saludable que la industrial, ya que no contiene conservantes y puedes utilizar muy poca cantidad de azúcar para elaborarlo. ¡Vamos a ver cómo se hace!
Antes de empezar a cocinar nuestra mermelada de mora debemos preparar los tarros para envasarla y esterilizarlos. Para ello debemos limpiarlos bien y hervir las tapas y frascos durante 20-25 minutos y dejarlos secar sobre un paño limpio, de algodón, boca abajo (sin la tapa puesta).
Una vez tengamos nuestros recipientes listos limpiamos bien las moras, les quitamos el rabito superior si lo tuvieran y las colocamos en un bowl para pesarlas.
2.- Medimos el azúcar y la fruta
Una vez hemos limpiado bien la fruta nos disponemos a pesarla. Coloca las moras ya limpias en un recipiente y pésalas en una báscula de cocina. Haz lo mismo con el azúcar. La relación fruta/azúcar es una de las claves de la mermelada, ya que cada fruta necesita una cantidad de azúcar diferente, en función de su dulzor, madurez, acidez y pectina que contenga. En este caso yo he añadido la mitad de azúcar que de fruta: 500 gramos por cada kilo de moras.
3.- Maceramos las moras
Una vez hayas pesado los ingredientes, coloca las moras en un bowl de cocina y cúbrelas con azúcar. Las moras son una fruta que tiene poca pectina, por lo que necesitamos agregarle pectina o acidez, y esto lo conseguimos añadiendo el zumo de limón. Echa un chorro de zumo de limón y remueve bien para que la fruta suelte el jugo y se mezcle todo bien. Una vez hecho esto, cubre el recipiente con papel film y guárdalo en la nevera durante unas horas para que se macere.
4.- Cocinamos a fuego lento
Ponemos la pasta en una hoya y la cocinamos a fuego lento durante 40 min removiendo de vez en cuando para que no se pegue. Una vez hecha la mermelada se apaga el fuego, se deja reposar unos segundos y se tritura un poco con ayuda de una minipimer, dependiendo de si te gusta encontrar trozos de fruta en la mermelada o no. A mi personalmente me gusta que tenga tropezones.
5.- Envasamos la mermelada de mora
Finalmente envasamos la mermelada de mora en tarros de cristal previamente esterilizados, dejamos 1 cm sin rellenar hasta el borde superior, los cerramos bien y los dejamos boca abajo durante 24 h en un lugar fresco, seco y oscuro. Esto hará que se envase al vacío, luego etiquetamos los botes con la fecha de producción y ya podemos almacenarlos en la despensa durante meses, incluso años.
Cómo hacer mermelada de mora en vídeo
Consejos para hacer conservas
Deja que la fruta se transforme con el azúcar el tiempo que necesite. ¡Sé paciente! Valdrá la pena…
Los botes de mermelada abiertos deben guardarse en el frigorífico mientras se estén consumiendo.
La mermeledas se deben almacenar en un lugar seco y oscuro, con una temperatura entre los 10º y los 21º C.
Una vez llenos, limpia las bocas de los tarros con un paño limpio y húmedo para eliminar cualquier partícula que impida que la tapa se cierre correctamente o que haga que le entre aire y no se envase al vacío.
Si te ha gustado la receta de mermelada de mora, te recomiendo que le eches un vistazo a la mermelada de manzana, otra receta para chuparse los dedos.
Ya puedes degustar tu maravillosa mermelada de mora, úntala en pan tostado, acompáñala con quesos y patés, rellena bizcochos y crepes, tienes un sinfín de opciones, disfrútala.
¡Hola a todo el mundo! Me llamo Dulce y tengo una empresa de conservas. Trabajo todos los días con este tipo de productos desde hace más de 20 años, por lo que soy una experta cocinera de mermeladas y confituras.